* Artículo adaptado del original “Why Bitcoin is Different” escrito por Jimmy Song, Educador y desarrollador de Bitcoin y autor del libro “Programming Bitcoin”.
Si eres nuevo en el ecosistema Bitcoin, los últimos meses han sido una locura.
Ha habido algunas subidas pronunciadas y caídas que paran el corazón haciendo una montaña rusa de emociones que no es fácil de controlar. La acción del precio es emocionante y, a veces, dolorosa, por lo que es fácil olvidarse en lo que se está invirtiendo.
Todas las criptomonedas parecen ir de la mano, así que ¿cuál es la diferencia real entre ellas? ¿Cómo se distingue una moneda de otra? Y lo que es más importante, ¿cómo puede un inversor saber cuál será el valor a largo plazo de una moneda?
En este artículo, voy a defender lo que hace diferente a Bitcoin frente al resto de monedas y cómo Bitcoin es un sistema que, a pesar de todos los intentos de ser copiado -Altcoins-, aún no ha sido replicado de verdad.
Innovación real
Para entender realmente la propuesta de valor de Bitcoin, es conveniente mirar un poco al pasado.
Es tentador pensar que el nuevo ICO o la última Altcoin será el que finalmente “mejorará” a Bitcoin y solucionará todos sus problemas, relegandole al cubo de la basura de las criptomonedas debido a su falta de alguna “característica especial”.
De hecho, casi todas las Altcoins, ICOs o hardforks están pensados para ser innovadores de alguna manera. Lo que se tiende a olvidar es que la mayor innovación ya ha ocurrido.
La verdadera innovación es la escasez digital descentralizada. Bitcoin fue la primera en lograrla y, como se verá en este artículo, sigue siendo la única moneda de este tipo.
Características como mayor rapidez de los tiempos de confirmación, los cambios de protocolo, el uso de diferentes algoritmos de firma o una privacidad mejorada son realmente pequeñas variaciones de la gigantesca innovación que es Bitcoin.
Es importante recordar que desde 2011 se han propuesto numerosas alternativas a Bitcoin. Hoy por hoy, ninguna de ellas ha estado ni siquiera cerca de desplazarle en términos de precio, uso o seguridad.
- IxCoin fue un clon de Bitcoin creado en 2011 con mayores recompensas en el minado de sus bloques, la cual se creó con un “lote de preminado”, es decir, una gran cantidad de monedas que el creador de la plataforma se guarda para sí mismo.
- Tenebrix fue un altcoin creado en el mismo año que la anterior, y su mayor innovación fue añadir una resistencia al minado a través de GPU -Tarjeta Gráfica-. Esta moneda también nació con un preminado para su creador.
- Solidcoin fue otro altcoin creado también en 2011 y, de igual forma, con preminado. Su característica especial fue mayor rapidez en la red.
Las únicas monedas que sobrevivieron a esa época fueron Namecoin y Litecoin, las cuales, a parte de sus características diferenciales, se distinguieron por no haber sido creadas con un lote de preminado para el creador.
CoinMarketCap en Mayo de 2013
Por otro lado, las ICOs tampoco son nuevas.
- Mastercoin hizo un ICO en 2013 con -sí, lo adivinaste- un preminado y recaudó más de 5000 BTC. En ese momento y tuvieron que cambiar su marca a Omni porque el ecosistema alrededor de Mastercoin no tenía alma de proyecto sólido.
- En 2015, Factom hizo una ICO y recaudó más de 2.000 BTC. A pesar de ello, tuvo que hacer varias rondas de financiación adicional porque se quedaron sin dinero.
En otras palabras, todos estos nuevos y “emocionantes” tokens han funcionado muy mal y, en realidad, no han sido de mucha utilidad. Altcoins e ICOs han probado muchas “características” diferentes y la mayoría no han sido útiles o adoptadas por el resto de la comunidad.
Entonces, ¿qué pasa? ¿Por qué parece que Bitcoin ocupa un lugar especial en el ecosistema? ¿Por qué Bitcoin es diferente?
Exploraremos dos aspectos únicos que hacen a Bitcoin diferente a todo lo demás: el efecto red y la descentralización.
El efecto red
Debido a que Bitcoin tiene la red de usuarios más grande, es decir, tiene el efecto red a su favor, el resto de monedas alternativas juegan al difícil juego de ponerse al día con respecto al líder.
Donde Bitcoin, digamos, es la semana de 7 días, cualquier otro altcoin es una ligera variación que intenta aportar un enfoque novedoso, sin lograrlo. (“¡Tengamos semanas de 4 días!” “¡Hagamos que el día sea de 18 horas!” “¡Cambiemos el nombre de los días a algo diferente!” “¡Vamos a variar la duración de las semanas según los caprichos de una autoridad central!”)
No hace falta decir que este tipo de “innovaciones” son, en el mejor de los casos, menores y, por lo general, no se adoptan.
Esto se debe a que el efecto de red de Bitcoin crece con el tiempo. Por ello, las personas que utilizan su red la optimizan hacia los estándares que debe tener, atrayendo a más y más personas hacia Bitcoin.
A medida que la red crece, lo que vemos es que los beneficios sutiles e invisibles de Bitcoin se van añadiendo a sus estándares. Lo que a primera vista puede parecer ineficaz, en realidad tiene efectos de segundo y tercer orden que benefician a las personas que se ajustan a los estándares de la red.
Por ejemplo, un coche no vuela ni entra en el agua porque el coche ha sido optimizado para su uso en suelo firme. La falta de esas características adicionales hace que el coche sea más útil ya que es más fácil de aparcar (tamaño más pequeño que un híbrido teórico de barco/coche/avión), más económico de mantener, más barato de obtener combustible, etc.
Además, estas normas de la red han resistido la prueba del tiempo y han demostrado su resistencia de maneras que no son obvias. Tu no querrías ser la primera persona en volar en un coche/avión híbrido, por ejemplo, porque no sabrías lo seguro que es un vehículo así.
Algo que ha existido previamente ha demostrado su relativa seguridad. Bitcoin, en cierto modo, tiene la recompensa de errores más grande del mundo para revelar cualquier defecto de seguridad en su código.
Como resultado, Bitcoin ha demostrado su seguridad con lo único que realmente puede probarla: el tiempo. Todas las demás monedas son mucho más jóvenes y/o han demostrado ser menos seguras.
De hecho, la dudosa naturaleza de muchas de estas “características” se hace evidente con el tiempo.
Por ejemplo, el lenguaje Turing Complete de Ethereum hace que toda la plataforma sea más compleja y vulnerable (ver el ejemplo de The DAO). En contraste, el lenguaje de contratos inteligentes de Bitcoin, Script, ha evitado la integridad de Turing por esa misma razón.
La respuesta habitual de las criptomonedas centralizadas es arreglar estas vulnerabilidades con un comportamiento aún más autoritario (rescates, softforks, hardforks, etc.), alejándose del propósito descentralizado con el que se construyeron. En otras palabras, el efecto red y el tiempo se combinan con la centralización para hacer que las monedas alternativas sean aún más frágiles.
Bitcoin tiene la red más grande y eso significa que Bitcoin crece en utilidad por el simple hecho de tener más usuarios. De la misma forma que es mucho más fácil conseguir accesorios para un teléfono popular que uno impopular, el ecosistema que rodea a Bitcoin hace que la obtención y el mantenimiento de Bitcoin sea mucho más fácil que, por ejemplo, la nueva altcoin o ICO de la semana.
Descentralización
La otra propiedad principal de Bitcoin que no tiene ninguna otra moneda es la descentralización. Y por descentralizado, me refiero a que Bitcoin no tiene un solo punto de fallo. Cada otra moneda tiene un fundador o una compañía que creó su moneda y ellos tienen la mayor influencia sobre la moneda.
Un hardfork (un cambio en el protocolo de una criptomoneda del que no hay marcha atrás) que se impone a los deseos de los usuarios, por ejemplo, sería una indicación de que la moneda está bastante centralizada.
Las monedas centralizadas tienen la “ventaja” de poder cambiar las cosas rápidamente en respuesta a la demanda del mercado. La centralización es, sin duda, una buena cosa para las empresas, ya que a menudo están tratando de obtener un beneficio mediante la prestación de algún bien o servicio a sus clientes. Un negocio centralizado puede responder mejor a la demanda del mercado y cambiar lo que vende por mejores ganancias.
Para el dinero, sin embargo, la centralización es algo malo.
En primer lugar, una de las principales propuestas de valor para una reserva de valor es ser algo que no cambia cualitativamente (también conocido como inmutabilidad). Una reserva de valor requiere que sus cualidades permanezcan iguales o mejoren con el tiempo.
Un cambio que deteriora sus cualidades (por ejemplo, la inflación de la oferta, la disminución de la aceptación, el cambio de la seguridad) cambia drásticamente la utilidad del dinero como depósito de valor.
En segundo lugar, la centralización de la moneda tiende a cambiar las reglas, a menudo con efectos catastróficos. De hecho, la economía del siglo XX es la historia de los bancos centrales que degradan lentamente la reserva de valor de la utilidad del dinero fiduciario.
La moneda fiduciaria promedio tiene una vida útil de 27 años por esta razón, a pesar del respaldo de entidades poderosas como los gobiernos y el uso casi universal en todo un país como medio de cambio. Las “características”, la capacidad de reaccionar rápidamente y el uso simplemente no importan tanto para la supervivencia de una moneda como la escasez y la inmutabilidad.
Todas las criptomonedas e ICOs distintas de Bitcoin están centralizadas. Para un ICO, esto es obvio. La entidad que emite el ICO y crea el token es la parte centralizada. Ellos emitieron la moneda y, por lo tanto, pueden cambiar el uso del token, alterar los incentivos de la moneda o emitir tokens adicionales. También pueden negarse a aceptar ciertas monedas para su bien o servicio.
Las altcoins tienen el mismo problema, aunque no de una manera tan obvia. Por lo general, el creador es el “dictador de facto” de la moneda y puede hacer las mismas cosas que un gobierno: subir los impuestos, aumentar la inflación creando más monedas, cambiar el protocolo, etc.
Como poseedor de una altcoin, tienes que confiar no sólo en el líder actual, sino en todos los futuros líderes de la moneda, por lo que no son cualitativamente diferentes de las monedas fíat como el dólar o el euro.
En otras palabras, obteniendo y manteniendo altcoins o tokens proporcionados ICOs no eres dueño soberano sobre tus propias monedas. Esto es particularmente agudo en el mayor “competidor” de Bitcoin: Ethereum.
Se mire por donde se mire, Ethereum está controlado centralmente. Ethereum ha tenido al menos cinco hardforks en las que los usuarios se han visto obligados a actualizar. Rescataron a The DAO pese a su mala toma de decisiones. También se estaba hablando de un nuevo impuesto sobre el almacenamiento. El control centralizado se mostró desde el principio de su creación con sus grandes preminados.
Bitcoin es diferente. Una de las mejores cosas que hizo Satoshi Nakamoto -su creador- fue desaparecer. En los primeros días de Bitcoin, Satoshi controlaba mucho lo que estaba desarrollado. Al desaparecer, ahora tenemos una situación en la que personas con diferentes ideologías y gustos políticos tienen algo que decir sobre cómo se maneja la red. Cada actualización en Bitcoin es voluntaria (es decir, no son hardforks, sino softforks) y no obliga a nadie a hacer nada para mantener su Bitcoin.
Conclusión
Puede que, llegado a este punto, te reveles diciendo: ¡pero hay muchos altcoins y le están comiendo terreno a la capitalización de mercado de Bitcoin!
En primer lugar, la capitalización bursátil es una medida muy manipulada. En segundo lugar, los mercados por naturaleza tienen mucho ruido y sólo se suavizan a lo largo del tiempo.
Debido al efecto de red y a la descentralización, Bitcoin es diferente de todos los pretendientes a su trono. Eso no quiere decir que no pueda haber nada que pueda desplazar a Bitcoin. Esta afirmación sería demasiado amplia y optimista de las posibilidades de Bitcoin.
Pero lo que queda claro al estudiar la historia del mercado de las criptomonedas es que Bitcoin tiene una ventaja que no cederá muy fácilmente. Una nueva “característica” a expensas del efecto de red y de la descentralización no es simplemente una buena compensación.
¿Qué se necesita para desplazar a Bitcoin? Lo más probable es que sea una innovación al menos tan grande como Bitcoin en sí o un error que hace que Bitcoin sea inseguro. Ajustar algunas variables no va a ser suficiente para que otra moneda se ponga al día.
Incluso añadir una gran característica (por ejemplo, la privacidad) probablemente no sea suficiente, ya que la creciente comunidad de usuarios de Bitcoin -el efecto de red- ya ha creado un ecosistema específico para Bitcoin.
La descentralización tampoco es fácil de lograr para el resto de monedas, y los otros países no han encontrado la manera de guiar su moneda en esa dirección. Incluso la idea de guiar una moneda en una dirección sugiere una moneda centralizada.
Es difícil imaginar que los creadores de monedas valiosas quieran descentralizarse, ya que están incentivados emocional, económica y socialmente para mantener el poder sobre sus creaciones.
Bitcoin es diferente porque, a diferencia de las altcoins, Bitcoin creó una nueva categoría y, como resultado, tiene el efecto de red. Bitcoin seguirá siendo distinto porque, a diferencia de las monedas centralizadas, está impulsada por el mercado, es inmutable e inembargable. Estas son las propiedades de un gran almacén de valor y esto le da a Bitcoin una utilidad que ningún otro token tiene.
Como inversores esperanzados, es tentador creer que hemos encontrado una criptomoneda o ICO que mejorará a Bitcoin y nos convertirá en los primeros en adoptar la revolución.
Desafortunadamente, las ilusiones no cambiarán las propiedades tan fundamentales como el efecto red o la descentralización.
Miles de monedas a lo largo de 10 años no han conseguido reproducir estas propiedades, las cuales son la razón por la que Bitcoin es la verdadera revolución.
